Noviembre inicia con nuevos aumentos en servicios esenciales y combustibles
Desde el 1 de noviembre, se implementará aumentos en las tarifas de gas, electricidad, agua y combustibles tras ajustes aplicados en octubre.
Noviembre inicia con nuevos aumentos en servicios esenciales y combustibles
1 de noviembre de 2024
El comienzo de noviembre trae consigo una nueva serie de incrementos en los servicios esenciales y combustibles en Argentina. Según el anuncio del Gobierno, las tarifas de gas, electricidad, agua y combustibles registrarán aumentos a partir del primer día de este mes. Estas llegan tras una serie de ajustes realizados en octubre, y la intención detrás de estos incrementos es reducir la carga de subsidios, ajustando los precios al costo real de medidas de producción.
Para el sector de gas, la suba será de un 2,7%, un ajuste que sigue a la baja del 5% aplicado el mes pasado. En el caso de la electricidad, se aplicará un aumento del 2,5%, luego de que en octubre el incremento había sido del 3%. Estos valores buscan acercarse al costo de producción y disminuir la dependencia de los subsidios estatales, uno de los objetivos centrales de la política energética del Gobierno en el contexto de la ley.
Por su parte, el servicio de agua, que en gran parte del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) está bajo la gestión de la empresa estatal Aysa, tendrá un aumento del 4%. Este ajuste forma parte de una política que la empresa ha venido desarrollando en los últimos meses con el fin de mejorar la infraestructura y garantizar la sostenibilidad del servicio a largo plazo.
En cuanto a los combustibles, se estima que el precio de la nafta y el gasoil registrará un incremento del 2,75%. Este ajuste en los precios de los combustibles también responde a la necesidad de reducir los subsidios en el sector y de alinear los precios a los costos del mercado internacional, en un contexto de inflación que continúa siendo una de las preocupaciones.
Desde el Ministerio de Economía se destacó que estos incrementos son parte de un esfuerzo para enfrentar los desafíos inflacionarios y sostener las finanzas del Estado. La inflación es un problema que afecta de manera significativa el poder adquisitivo de los ciudadanos, y según funcionarios de la cartera económica, estos ajustes tarifarios son necesarios para abordar el desequilibrio entre los ingresos y los gastos del Estado, especialmente en un contexto de elevado déficit fiscal. Reducir la carga de subsidios en servicios esenciales, aseguran, es un paso fundamental en esta dirección
Sin embargo, los aumentos no han pasado desapercibidos para la ciudadanía, que ya venía sufriendo el impacto de la inflación en sus gastos cotidianos. Los aumentos en servicios básicos y combustibles repercuten directamente en el bolsillo de los argentinos, que incluso con preocupación de cómo el costo de vida se incrementa mes a mes.
Economistas y analistas también han opinado sobre la política de ajustes en tarifas, señalando que, si bien la reducción de subsidios es una medida necesaria en términos fiscales, debe ir acompañada de políticas de contención que mitiguen su impacto en la población más vulnerable. La falta de una estrategia clara para abordar los efectos en el corto plazo es un tema que sigue generando debate e incertidumbre.
El Gobierno, por su parte, se ha comprometido a mantener un diálogo abierto sobre la evolución de los precios y sus efectos, asegurando que continuará monitoreando el impacto de estos aumentos en los niveles de vida de los ciudadanos. Además, se espera que en las próximas semanas se revisen posibles medidas de asistencia a sectores vulnerables, mientras las autoridades buscan equilibrar la reducción de subsidios con política.